Nordkapp en moto, mayo´14... Parte 3 y última!!

Lunes, 12 de mayo de 2014. La Hazaña roza la Tragedia




Salté de la cama a las 7:30 de la mañana, totalmente agotado por no haber conseguido dormir bien e inmediatamente cogí la moto para ir al taller de neumáticos. Nada más llegar el chico, en un horroroso inglés apenas incomprensible, me dijo que tenía en stock el neumático delantero, pero no el trasero. Pensando que con eso podía dar solución a la mitad del problema, le dije que me lo cambiara, a lo que el chico me contestó que ellos no tocaban motos; le tenía que dar la rueda desmontada para hacer el cambio!! Yo no tenía herramientas para hacerlo, así que le pedí colaboración para ver cómo podíamos hacerlo… Su consejo fue que me acercara a un concesionario de motos de nieve y quads que había 14 kms al norte (por donde pasamos el día anterior) y les preguntara a ellos si tenían ruedas o me podían desmontar la mía.


Cogí la moto de nuevo, totalmente desconcertado con la respuesta del taller y me marché en busca del concesionario. Cuando llegué, había dos mecánicos reparando sendas motos de nieve y cuando les pregunté si tenían neumáticos para mi moto me dijeron que esperara, pues estaban ocupados trabajando… Tras más de media hora esperando, con un enorme cabreo en aumento por mi parte, se incorporó a su puesto la chica de la oficina y fui inmediatamente a preguntarle. Me dijo que no tenían esas ruedas pero si quería, me podían desmontar la rueda. El panorama que se me presentaba era complicado, pues necesitaría que alguien me llevara al concesionario con la rueda desmontada y llevarme de nuevo a la moto después… Y todo para dar solución sólo a la rueda delantera!!




Al final, decidí echarle valor y buscar solución en otras ciudades, así que volví al hotel y, mientras Maribel se preparaba para salir, estuve hablando con mi seguro y buscando concesionarios por internet. Tras unos minutos de llamadas varias, conseguí hablar con un concesionario BMW en Trondheim que tenían en stock mis neumáticos. “Sólo” tendría que hacer 447 kilómetros para llegar, pero afortunadamente me pillaba en la ruta prevista!!


Mi seguro me confirmó que si me quedaba tirado por el camino, me recogerían la moto sin problemas para llevarla al taller más cercano, así que como las ruedas de esta moto son blindadas y en teoría no pueden reventar, decidimos hacer el camino hasta Trondheim a la mínima velocidad posible…


Ese día fue una tortura!! El clima seguía acompañando pero, por una parte la ruta transcurría por el interior, con unos paisajes más normalitos sin los espectaculares fiordos y por otra, la tediosa velocidad hizo la jornada interminable. Llevamos velocidades de entre 40 y 60 kilómetros por hora en las rectas y algo menos en las curvas para evitar que sufriera la rueda delantera… No paramos ni a comer, puesto que el navegador me decía que podríamos llegar al taller antes de la hora del cierre si seguíamos esa marcha. De ese tramo, apenas tenemos alguna foto suelta, pues íbamos más pendientes de posibles reacciones extrañas de la moto ante una pérdida de presión de los neumáticos.




Totalmente agotados, llegamos a Tronheim y encontramos a la primera el taller. Cuando me bajé de la moto, me quedé helado!! No pensaba que una rueda pudiera llegar a ese estado en marcha…


Aunque me estaban esperando, el jefe de taller me dijo que no me la podían meter en ese momento, así que tendría que volver al día siguiente. Inmediatamente, le señalé la rueda y le rogué que me las cambiara, pues no debería seguir rodando en ese estado para buscar hotel, pero el noruego me dijo que no me preocupara, que las había visto peores y que aguantarían unas vueltas más por ciudad!!


Uno de los mecánicos era Alberto, un español de Mallorca afincado allí. Le pedimos ayuda para convencer a su jefe, pero nos dijo que no podía hacer nada… Eran las 16,30hrs y perderíamos unos 150 kilómetros según nuestro programa, pero me tranquilizaba el hecho de tener ruedas frescas al día siguiente, así que nos pusimos a buscar hotel.




Como ya nos temíamos, el precio de los hoteles más cercanos al taller, se salía de nuevo de nuestro objetivo diario, pero no nos quedó otra que aceptar lo que nos ofrecieron. Afortunadamente, la habitación valía cada una de las koronas que pagamos por ella, con desayuno incluído, mucho espacio, una cocina completa y una televisión de plasma enorme!!




Ese día había sido agotador y con un nivel de estrés alto, así que pasamos por un cercano centro comercial para comprar comida y cena y nos tiramos la tarde descansando en la habitación mientras veíamos fotos, vídeos y “skypeábamos” con nuestras hijas.


Ahora ya sí, todo se solucionaría al día siguiente… O tendría alguna sorpresa reservada??


Kms parciales: 7.214




Martes, 13 de mayo de 2014. Recuperando nuestro Viaje Soñado




Al igual que el día anterior, salté de la cama temprano para dar solución a los neumáticos de mi moto, pero afortunadamente esa noche si descansé, pues ya tenía la tranquilidad de que todo se arreglaría. Llegué al taller 15 minutos antes de su apertura y encaré la moto a la entrada para dejar claro que yo tenía que ser el primero. 




Ese día prometía mucho (Carretera del Atlántico, Escalera de los Trolls, Geiranger, etc…) y llevábamos algo de retraso, así que insistí en que lo agilizaran todo lo posible.




Mientras esperaba en el concesionario, estuve deleitándome con las nuevas motos de BMW, entre las cuales me encantó la nueva Adventure 1200… 











Tras una hora y media que me pareció eterna, el jefe de taller me entregó, sin anestesia, la factura. Así que era esa la sorpresa que tenía reservada?? Al ver el montante, le pregunté si estaba seguro de que era correcta y éste me respondió, con una sonrisa maliciosa: “Everything`s expensive in Norway!!” No olvidaré esa frase, ni las 6.087 koronas que me costaron mis nuevas Metzeler (casi 800 euros), así que pagué disciplinadamente y salí de allí feliz, totalmente encantado con mi moto al 100%. Recogí a Maribel y nos pusimos rumbo a Kristiandsund para recorrer la célebre Carretera del Atlántico.



Un par de horas y un ferry después, salimos de Kristiansund por el túnel de peaje dirección Molde. Es un sorprendente túnel que une dos islas a unos 250 metros por debajo del mar que representa el acceso a la famosa Carretera del Atlántico, la mayor obra civil realizada en toda la historia de Noruega. El día seguía estando despejado, pero corría un aire terrible. El paisaje estaba abrasado por las muy recientes nevadas, pero disfrutamos igualmente de ese tramo tan sorprendente. Pasamos por el Storseisundet Bridge, el puente más famoso de esa carretera y fue tan asombroso que dimos la vuelta y lo volvimos a cruzar de nuevo dos veces más…





De nuevo cogimos otro ferry que nos facilitó el camino hacia Andalsnes, para dirigirnos hacia la famosa Escalera de los Trolls. Ya allí, hicimos la obligada parada en la única señal del mundo que advierte de posibles Trolls en la carretera y comenzamos la ascensión de esa maravilla de la Ingeniería Civil.





Desde abajo se veía una gran nube en lo alto del puerto que no parecía amenazante, pero al ir subiendo fuimos viendo que cada vez se estaba haciendo más y más densa. La temperatura bajó hasta los 3 grados bajo cero arriba del todo, pero no podíamos dejar de caminar hasta el espectacular mirador que ofrece una vista única de la totalidad de la carretera.





Tras haber disfrutado de unas emocionantes vistas, estuvimos unos minutos visitando la tienda de regalos, con su nada razonable cartel en la puerta de prohibida la entrada a perros y trolls (qué culpa tienen los perros de que los trolls no sepan comportarse en una tienda), la amenazante nube nos recibió con una copiosa nevada. Curiosamente, a mi me cayeron unas pocas gotas en la salida de España, pero para Maribel fue la única vez que le cayó agua del cielo en todo el viaje, además en su forma sólida!!




Teníamos previsto seguir hasta Geiranger para ver el glaciar y el fiordo más famoso de toda Noruega, así que seguimos adelante por la misma carretera, que sospechosamente seguía subiendo y la temperatura bajando, pero afortunadamente la nieve tardó poco en amainar.


Llegamos a una altitud de unos 700 metros sobre el nivel del mar y los tomos de nieve a ambos lados de la carretera eran tan espectaculares, que no había forma de poder diferenciar ningún glaciar, así que seguimos hacia adelante…




Cuando bajamos el puerto vimos el pequeño, aunque magnífico, camping Gjerde, antes de llegar a Valldal. Aunque era aún muy pronto, su precioso entorno nos empujó a preguntar por el precio de un hytter y, como estábamos cansados y el precio nos encajó, directamente nos quedamos allí. Ya recuperaríamos el espacio perdido cuando dejáramos Escandinavia!!


Ya instalados, nos acercamos a un super cercano (allí, cercano quiere decir a 9 kilómetros) y compramos unas sabrosas ensaladas para la cena. La única pega de ese camping, fue que no disponía de wifi, ni siquiera de pago, pero también nos vino bien una noche desconectados del mundo conocido…


Kms parciales: 7.591


Miércoles, 14 de mayo de 2014. Último día en El Paraíso




Amaneció de nuevo con un fantástico y soleado día. Temprano, como de costumbre, nos pusimos en ruta camino a Geiranger. Tras media hora y un nuevo ferry, llegamos a un fantástico mirador desde el que había una increíble vista del fiordo.







Una vez más, por más que intente explicar con palabras la belleza del lugar, estaría meses buscando adjetivo y nunca serían suficientes. Prefiero mostrar con un vídeo y algunas fotos, lo que pudimos ver allí.







Desde arriba se veía un barco en el centro del fiordo. Parecía un pequeño ferry, pero según íbamos bajando, nos dimos cuenta que era un crucero de muy buen tamaño. 




Totalmente embelesados, llegamos al pueblo al pie del fiordo y estuvimos un par de horas visitando las tiendas y charlando con nuestro amigo el Troll.





Debido a las innumerables crónicas que había leído para preparar el viaje, yo sabía que a partir de ese punto, todo se volvería más “normal”, menos espectacular, así que me costó mucho trabajo volver a sentarme en la moto y despertar del sueño… No obstante, al final tuvimos que ponernos en marcha y seguimos adelante hacia Oslo, tomando dirección Lom.




Al subir el puerto de Geiranger hacia el lado contrario desde el que habíamos venido, nos despidieron unas muy bonitas vistas. Pensábamos que ya todo sería bastante más aburrido a partir de ese momento, pero… qué equivocados estábamos!!




La carretera no hacía nada más que subir. Cuando pensábamos que ya no podíamos estar más altos, a una altitud de unos 800 metros sobre el nivel del mar, el espesor de nieve en los bordes de la carretera era brutal. Aún así, seguimos subiendo más y más: 900 metros, 1.000 metros, 1.100 metros… El termómetro marcaba 6 grados bajo cero, pero cuando me preguntó Maribel yo le dije que “sólo” estábamos a 0 grados. No quería, ni que se preocupara, ni que el valor de la temperatura real le condicionara anímicamente para tener más frío. El caso es que los dos íbamos helados y yo muy preocupado, porque aquello parecía no tener fin!! Llegamos a ver hasta los 1.139 metros de altitud, que en esa latitud supone mucho, mucho frío y por fin llegamos al punto más alto.




Al comenzar el descenso por la vertiente sur, el espesor de nieve empezó a bajar y ya comencé a tranquilizarme. Además, la carretera si hizo más recta y cómoda y podíamos avanzar muy rápido hacia el sur. En una gasolinera más adelante, vimos una especie de museo de figuras talladas en madera que nos mantuvo un rato entretenidos mientras descansábamos. 


Luego, nada más cruzar la frontera de nuevo a Suecia, pasamos por un Ikea, que a Maribel le gusta mucho y tenía ganas de ver uno en su país de origen. Lo cierto es que es totalmente calcado a los de aquí y no sólo en los productos ofrecidos, sino incluso en la forma y construcción de la nave. Nos comimos el perrito caliente reglamentario y seguimos en marcha...




A partir de ahí, tan sólo comentar que queríamos llegar a Gotteborg a dormir y lo conseguimos, a pesar de un monumental atasco que sufrimos al cruzar Oslo… Elegimos un bonito centro residencial temático, junto al parque de atracciones, en el que nos ofrecieron una bonita habitación con desayuno a un precio razonable. 


El día había sido muy completo y emocionante, pero nos acostamos un poco tristes, pues al día siguiente teníamos previsto abandonar la bella Escandinavia.


Kms parciales: 8.366








Jueves, 15 de mayo de 2014. Abandonando Escandinavia




Os tengo que advertir, queridos amigos y seguidores, que a partir de aquí la crónica será más escueta, rápida y aburrida, pues teníamos 4 días para hacer los 3.000 kilómetros que nos separaban de casa.


En esta ocasión, me apetecía salir de Suecia por mar, así que pusimos destino a Helsingborg para cruzar en ferry hasta su homóloga danesa Helsingor. Mientras esperábamos el ferry, comprobé que el nivel de aceite de la moto seguía siendo correcto y los neumáticos nuevos seguían estando nuevos.






Ya en Dinamarca, pasamos por Copenhague para que lo conociera Maribel, pues a la ida se lo había saltado en el avión y fuimos directamente al centro, a pasear por el sorprendente Christiania y a conocer a la famosa Sirenita.






Sin mucha demora, seguimos adelante hacia Rodby para cruzar en nuestro último ferry hasta Puttgarden, ya en Alemania y comimos en el mismo barco, pues ese tramo duraba unos 45 minutos.






De nuevo en Alemania, tal y como estaba previsto, pudimos avanzar más rápido gracias a sus autobahn, sin límite de velocidad. De nuevo me agradó la correcta forma de circular de los alemanes, circulando siempre por el carril derecho y utilizando el izquierdo sólo para adelantar, como debería ser aquí. Algunos de esos adelantamientos que sufrimos, fueron extraordinariamente rápidos, pues yo no acostumbro a ir muy rápido y algunos BMW, Mercedes, Porsche, Ferrari y similares circulaban tranquilamente a más de 200 ó 250 kilómetros por hora. Era ver la señal de “barra libre” y todos a toda leche!!




Esa noche llegamos a Bremen, donde dormimos en un agradable Bed and Breakfast que curiosamente no tenía disponible el Breakfast...


Kms parciales: 9.226









Viernes, 16 de mayo de 2014. Reencontrando a una Buena Amiga




Nos costó una barbaridad salir de la cama… Los kilómetros empezaban a pasar factura seriamente y cuando nos sentamos en la moto, los dos nos miramos con resignación y nos pusimos en marcha. Para ese día, teníamos previsto dar un pequeño rodeo por un pequeño pueblo belga llamado Tessenderlo, de la provincia de Antwerpen (Amberes), para visitar a unos amigos que se trasladaron allí a vivir hace un año.




Llegamos a ver a nuestra amiga Giorgiana y a su marido Catalin a mediodía y de ese trayecto tan sólo reseñar que sufrimos un buen atascazo al cruzar Dortmund y uno todavía mayor al atravesar Dusseldorf, pero al atravesar las fronteras de Holanda y Bélgica el tráfico fue bastante más fluido.


El reencuentro con nuestra amiga fue muy emotivo. Estuvimos comiendo con ella y tuvimos oportunidad de conocer el lugar donde trabaja, en el que su jefe guarda una gran colección de más de 60 coches antiguos (Rolls-Royce, Hispano-Suiza y otras joyas similares de principios del siglo pasado). Nos estuvo explicando que les va bien, pero que echan de menos lo bien que se vive en España…




Después de un par de horas de animada conversación tuvimos que seguir nuestro camino de cara a nuestra casa, en ese momento a tan sólo 1.600 kilómetros…


Al poco de cruzar a Francia, hicimos noche en Soissons, resultando el peor hotel de todo el viaje, con diferencia:  El Premiere Class!! Totalmente desaconsejable. Era muy barato, pero parece que se utiliza como picadero para parejas. Sucio, viejo, gastado, maloliente… Un desastre!! No tenían a nadie allí pero, por medio de un cajero automático, al meter la tarjeta te dicen la disponibilidad y te devuelven tu tarjeta y otra tarjeta de apertura de la habitación, después del pago. Si hubiésemos tenido tiempo de buscar otro hotel, aún a pesar de perder el dinero pagado por ese, lo hubiéramos hecho sin dudarlo, pero cuando paramos a dormir ya era tarde y nos iba a costar trabajo buscar otro, además de que estábamos ya agotados. Al final, nos resignamos y pasamos la noche asqueados, aunque pudimos dormir…


Kms parciales: 10.040


Sábado, 17 de mayo de 2014. El Retorno por La Belle France




Literalmente, huimos del lamentable hotel tan pronto como pudimos… Al salir pronto, el día nos cundió bastante y cruzamos Francia sin autopistas de peaje y totalmente relajados. Tan sólo nos entretuvimos un rato en París, pues queríamos pasar por la Torre Eiffel como de costumbre y al final nos metimos en un pintoresco mercadillo de alimentación que había justo al lado.




Tuvimos suerte de no coger mucho tráfico ni para entrar ni para salir, algo sorprendente, así que nuestra jornada avanzó según lo previsto…


A las 21 horas, llegábamos a Bayona y decidimos dormir allí para repartir equilibradamente los kilómetros con el día siguiente, pero lo cierto es que habríamos podido entrar en España sólo unos minutos después.







Para esa noche, elegimos un hotel Campanile que estaba fenomenal, tanto de precio como de aspecto de la habitación e incluso elegimos cenar en el mismo hotel una buena cena de gala para celebrar nuestro éxito durante el viaje hasta ese momento… Fue una gran cena y una estupenda noche en la que dormimos felices porque al día siguiente ya estaríamos con nuestras hijas!!


Kms parciales: 10.908









Domingo, 18 de mayo de 2014. RETO CONSEGUIDO!!




Esa mañana de domingo, ambos nos levantamos temprano sin necesidad de despertador, con una gran sonrisa dibujada en la cara… Por fin llegaríamos a casa!!




Nos pusimos en marcha sin ni siquiera desayunar, con la impaciencia de entrar en España. Como tenemos costumbre, desde Bayona siempre entramos en España por peajes, evitando un sinfín de rotondas que se hacen eternas. Pasamos el País Vasco en dirección a Pamplona y sin ningún contratiempo ni demora, a medio día estábamos entrando en nuestro pueblo, Alovera.


Estábamos felices. Llamamos a nuestras hijas y nos recibieron en la puerta de casa con alegría. Preparamos una broma en la que Maribel, queriendo demostrar la enorme cantidad de kilómetros que llevaba en el culo, entró en la calle tumbada boca abajo en la moto como los pistoleros llevaban a los heridos a caballo en el lejano oeste…




Nos recibieron como héroes. Sus padres habían estado en el Polo Norte, con Papá Noel y habían regresado para contarlo… Y todo ello en la moto!!


Da gusto ver esas caras de orgullo en unas niñas aún tan pequeñas, así que sólo por eso ha merecido la pena el viaje… Sin lugar a dudas, EL VIAJE DE NUESTRA VIDA!!




Conclusiones:


Afortunadamente, todo ha salido mejor que en la mejor de las previsiones… Estas son mis conclusiones del viaje:


- Habréis notado que apenas he hablado de la moto en todo el viaje. Eso ha sido porque estoy tan acostumbrado a su comodidad, su fiabilidad, su capacidad de carga, su facilidad de conducción, su seguridad y su impresionante aplomo en marcha, que me he centrado en lo que ha sido distinto para mí: el viaje. Sin lugar a dudas, es la moto PERFECTA para cualquier tipo de viaje por carretera. No ha dado ni el más mínimo problema, ni síntoma de fatiga. Ha consumido un leve chorrito de aceite, que se lo eché en el mismo Nordkapp, sobre todo para justificar la pequeña garrafita de un litro que he llevado todo el camino. El Control Cruise ha sido una ayuda extraordinaria para evitar capturas de radar por velocidad excesiva. La calefacción de los asientos y respaldos ha permitido que no pasáramos un frío significativo en jornadas en las que la temperatura ambiente bajó hasta los 6 grados bajo cero. En conclusión, por parte de la moto: CHAPEAU!!!


- Hemos atravesado 14 fronteras, a lo largo de 10 países, sin ni siquiera detenerme en ninguna de ellas. En todos los países se habla perfectamente inglés, imprescindible para entenderte con el 99% de la población (sólo tuvimos leves problemas de idioma una noche en un camping sueco y comprando la cena en una carnicería alemana). Llevamos sólo moneda en euros y tres tarjetas con chip, una de débito y dos Visa y no hemos tenido absolutamente ningún problema de pago en ningún país. En aquellos sitios donde queríamos llevarnos algunas monedas extranjeras para un amigo que me las había pedido, con pagar en euros, el cambio lo dan en moneda local, aunque en esos casos suelen hacer un cambio excesivamente generoso para ellos. Los precios, en general desorbitados para nuestros reglamentarios salarios ibéricos...


- Francia, Alemania y Países Bajos, están acostumbrados al tránsito de motos a menudo y, si pueden, te facilitan el paso y el adelantamiento. En los países nórdicos, sin embargo, te miran como a un bicho raro y está mal visto ponerse el primero en los semáforos, aparcar sobre las aceras que tienen espacio suficiente (como hacemos aquí) y pasar entre los coches en los atascos. Aún así, el respeto es máximo y a todos aquellos con los que comentábamos nuestro viaje, se solían sorprender, nos admiraban por ello y, generalmente, nos ofrecían la ayuda que necesitáramos en ese momento (salvo únicamente en el desagradable taller de motos de nieve de Mo i Rana).


- Hemos traído unos kilos de más. Lamentablemente, los precios de las comidas son excesivos y, con la intención de ser previsores ante posibles contratiempos económicos, hemos tenido que abusar de restaurantes de comida rápida. También al buscar las cenas en los supermercados, compramos mucho snacks y algunos dulces, no muy sanos en realidad, pero que saciaban nuestra ansiedad por las escuetas comidas. Aún así, no es nada que en unos días controlando la alimentación no se pueda solucionar…


- En cuanto a regalos y recuerdos, no ha habido sitio material para las compras que nos hubieran gustado. Yo iba abandonando la ropa interior y la mayoría de las camisetas tras su uso, razón por la que me había llevado todo lo más viejo posible, pero aún así, con un par de camisetas que trajimos y un reno de peluche pequeño, llenamos ese espacio. El principal inconveniente ha sido que había mucha diferencia de temperatura, entre la mínima extrema en el norte y la máxima entrando y saliendo de España, con lo que siempre teníamos que ser previsores de dejar hueco a pantalones de nieve, forros polares y demás ropa de frío para el regreso. Por lo menos, pude coger algunas pequeñas piedras del mismo Cabo Norte para unos amigos que me las pidieron y meterlas entre huecos de las maletas. También hay que tener en cuenta que llevaba mucho espacio ocupado por los dos sacos de dormir (de alta montaña, para -15º) y la numerosa herramienta que, tal y cómo debe ser, no hemos tenido que utilizar.


- Más datos relevantes:


* Os presento mi tabla de gastos completa, incluyendo en el apartado de varios las ruedas, los regalos y gastos especiales.




* Los datos del ordenador de la moto han sido fantásticos:


1) Kilómetros totales: 11.337,5
2) Velocidad media: 83 km/h
3) Consumo medio: 5,2 l/100km


* Hemos traído un total de 2.756 fotografías y 71 gb en vídeos, que he ido mirando “en diagonal” para poder hacer la crónica, aunque con más tiempo las tengo que revisar detenidamente. Si alguno quiere ver más fotos de algún lugar en concreto, puede pasar por casa sin ningún compromiso o decírmelo para subirle algunas más…


En fin amigos, éste es un viaje inolvidable, totalmente recomendable para todo aquel motero aventurero que le guste viajar pero, como digo en mi título, no apto para pusilánimes!!




Muchas gracias a todos por haber llegado hasta aquí, en especial a mis compañeros de viaje del grupo de whatssapp y un fuerte abrazo,

Dani M.


Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Muchas gracias por la crónica y por la tabla con los gastos. Estoy preparando el viaje para el verano que viene y crónicas como la tuya ayudan y animas mucho!

Un saludo y enhorabuena por el viaje
Damarsito ha dicho que…
Gracias a tí por leerlo y comentarlo... Pásalo en grande y, para cualquier duda, dame un toque que si está en mi mano, cuenta con ello...
Unknown ha dicho que…
Crónica perfecta, mi mujer y yo queremos subir en mayo del 2015, me ha ido bien para ver un poco la ruta y las paradas.
Espero que me salga como mínimo igual que a ti.
Damarsito ha dicho que…
Muchas gracias Oscar... Cualquier cosa que necesites, no dudes en ponerte en contacto conmigo!! Mucha suerte!!!
lulan ha dicho que…
buenísima crónica... yo la estoy preparando (la ruta a cabo norte) para julio de este 2015.... me ha venido muy bien esa tabla para ir haciendome una idea... ostras los 800 euros de neumáticos... me duele hasta mi...
conozco la zona, pero lo más arriba que llegué fue a falum, y el sur de noruega... y fue en una california.... nada que ver dentro de unos meses... por cierto me ha gustado la forma en que has escrito ... original y muy práctica por los datos que das...

muchas gracias!!!
Damarsito ha dicho que…
Gracias a ti Lulan, por entrar y comentar.... Así es cuando sientes que ha tenido sentido el trabajo de escritura y edicion de la crónica.
Pásalo genial en tu viaje y, si necesitas algo, no dudes en preguntar...
Un abrazo
Unknown ha dicho que…
Magnífico viaje. Fantásticas fotografías. Muy bien explicado.
Espero pronto poder sentir casi lo mismo que tu.
Enhorabuena a los dos y gracias por compartirlo.
Unknown ha dicho que…
Enborabuena por el viaje.
Fantásticas fotos. Magnífica moto. Destino mítico y único.
Espero un día sentir esas mismas vibraciones en esos mismos lugares.
Felicidades a los dos.
Maria josé ha dicho que…
Que fantástico viaje!!! lleno de anecdotas y emociones , me ha encantado toda la narración y detalles quedais ....es impresionante .....muy currado..y con los videos parecia iba tambien alli subida en la moto jajaja, asique mil gracias por compartir vuestras emociones, maravilloso todo de veras FELICIDADES !!!! un saludo
Damarsito ha dicho que…
Me alegro qu te haya gustado... Y muchas gracias por tu comentario, Mari Jose!!

😚😚
Unknown ha dicho que…
Genial!!

Ya lo había leído cuando lo escribiste en su día.
Me gustado incluso más la segunda vez... :)
Me parece una pasada de viaje; desde luego desde una silla se ve solo lo bonito y emocionante.
No me imagino como termina un cuerpo después de tantos kilómetros a lomos de una moto.
Por mi parte, chapó; sois increíbles.
Enhorabuena por la hazaña.
Damarsito ha dicho que…
Muchas gracias amigo!!!

Entradas populares de este blog

Construcción de Horno de Leña de Doble Cámara

Route 66 - El viaje de nuestra vida - Semana 1 de 3

Gracias Otto!!!